lunes, 4 de noviembre de 2019

Reflexiones del final del torneo

El final del partido con Mariano Moreno marcó el cierre de un nuevo torneo de la URBA. Muchos fuimos contentos, buscando una victoria que significara el ascenso y el cierre de la temporada. Con el resultado puesto, sabemos que la historia fue diferente, que fue derrota, y para que se pueda dar el ascenso será necesaria una última victoria, frente a CUBA dentro de dos semanas. A nosotros solo nos queda decir una cosa a los jugadores, cuerpo técnico y colaboradores... Gracias, muchas gracias por un gran año.

En estos últimos tres años hemos visto cómo un equipo que arrancó jugando en Grupo 1B se fue transformando y consiguió el ascenso; que el año pasado, con cambio de categoría incluido, terminó cuarto; y este año estuvo demasiado cerca del ascenso directo, superándose en muchos aspectos.


Si queremos ver el vaso medio vacío, siempre se podrá decir que este equipo perdió ocho partidos; que tuvo la chance y la dejó pasar; que es un equipo corto, diezmado; y tantas otras cosas más. Siempre va a haber alguién dispuesto a decir desde afuera el porqué no se puede conseguir algo.

Sin embargo, este equipo nos ha enseñado a no escuchar los "porqué no se puede". Porque al inicio del año pasado no era fácil pensar a un Olivos protagonista; porque este año no era sencillo superar al pasado, menos aún después de haber arrancado con cuatro derrotas al hilo. Tampoco fue fácil pensar que, pese a las bajas, lesiones y demás, el equipo siempre salió adelante.

A este equipo nadie le regaló nada y todo lo que consigue es por esfuerzo propio, por la unión, confianza y, sobre todo, por una convicción de acero en que las cosas se pueden conseguir; que se puede jugar un gran rugby, sabiendo que se deja todo en la cancha. Lo que no siempre se da es que esa unión, esa confianza, trascienda al equipo y contagie a los de afuera.

Volviendo adonde arrancamos, el sábado no fuimos confiados porque la victoria fuera sencilla, porque el rival fuera inferior o porque no hubiera forma de perder. Fuimos confiados porque este equipo, en todo este tiempo, contagió esa confianza, esa convicción, ese saber que sí se puede.

Quedan dos semanas antes del último partido del año y esa confianza, esa convicción no desaparece. Sabemos que, con el corazón que mostraron los jugadores y el apoyo de todo el club, todo es posible y eso ilusiona. Nos parece importante, antes de que termine el año, evitar que el árbol tape al bosque, que el resultado de un partido tape el trabajo de un año entero.

En el rugby, así como en todo deporte, a veces se gana y a veces se pierde. El sábado pasado fue derrota y nadie sabe lo que pasará con CUBA. Lo que sí sabemos es que ahí estarán ustedes para dejar el alma, para seguir yendo al frente, para buscar conseguir eso para lo que hay mil razones que dicen que no se podrá. También sabemos que nosotros también estaremos ahí, porque seguimos confiando, porque seguimos creyendo en ustedes, mas allá de un resultado.



Por todo esto... Gracias, muchas gracias por un gran año... es un orgullo que ustedes jueguen por todos los que estamos afuera. #SerDeOlivos…

1 comentario:

  1. Olivos ya ganó y digo sin dudar que ganó porque es un equipo formidable, donde la Unión y el compromiso es la llama que los guía y la misma que los unió desde siempre, todos de pie.pata aplaudir a este equipo de guerreros!!!!

    ResponderEliminar